Temor, temblor.
Mientras caminaba un sábado por la tarde en la Capital entre las calles Morandé con Miraflores siempre al estilo de Martin Rivas -extraño en un mundo ajeno, de repente me encontré con una feria llamada “XXVIII Feria del Libro Usado”, la cual, según me enteré al poco tiempo de entrar, que no se realizaba desde hacían 4 años debido a factores de crisis social y pandemia. A penas entré a la feria, debo reconocer que el lugar estaba lleno de gentes de todas las edades observando variados libros mientras sonaban de manera amena canciones al parecer italianas y francesas en el ambiente. Ocurre en situaciones como estas en Santiago que llega todo tipo de gente a veces por puro aburrimiento, sean lectores de verdad o simplemente por mera diversión o curiosidad, sobre todo a metros del Parque Forestal y el Cerro Santa Lucia. Mi primera intención al entrar fue darme cuenta de que, erróneamente a como pensaba, yo no era el único lector y amante de los libros en esta enorme ciudad de piedra....